La mayoría de las ciudades del mundo organizan de manera arbitraria el nombre de las calles, en cambio, en La Plata cada calle se corresponde con un número y se ordenan de forma correlativa. Es decir, que, aunque no conozcas la ciudad, podes llegar fácilmente a una dirección siguiendo la lógica. Es por este motivo que la inexistencia de la calle 52 promueve distintos mitos entre los platenses que se reproducen de generación en generación ¿Por qué no existe? ¿Qué secretos hay detrás?
Cómo se organizan las calles en La Plata
La ciudad de La Plata tiene la particularidad de nombrar a sus calles con números. Esto fomenta la facilidad de ubicación tanto de platenses, como de visitantes que llegan a estudiar en la Universidad o simplemente de visita.
Si bien, la lógica de enumeración de las calles es bastante intuitiva al constituirse de forma correlativa, también tiene algunas particularidades que pueden confundir a los ciudadanos.
Entre estas irregularidades, podemos encontrar que fuera del casco fundacional que va de 32 a 72 y de 122 a 31, las calles sufren drásticamente un cambio repentino en la correlatividad de sus calles. Tal es el ejemplo de pasar de 32 a 532 cuando nos acercamos al barrio de Tolosa.
Pero la exactitud que distingue a la ciudad se corresponde fundamentalmente con el caso urbano fundacional. También se puede objetar la existencia de las famosas diagonales que facilitan el tráfico, pero pueden confundir a más de una persona. En todo caso, podemos ir a una dirección que nos indiquen dentro del casco urbano sin consultar ningún mapa.
La ausencia de la calle 52
Conociendo las condiciones de exactitud que tiene la ciudad, llama poderosamente la atención la inexistencia de la calle 52. De la 51 se pasa directamente a la 53. Son dos cuadras unidas y en la mitad dónde debería estar la calle 52, se despliega el eje fundacional que alinea la famosa Catedral, la plaza principal, la municipalidad, la gobernación, el ministerio de justicia y el bosque. Este motivo, generó mitos adjudicados a distintos fenómenos que se correspondieron con la figura de los fundadores de La Plata.
Como sabemos, La Plata está envuelta en mitos que aparecen en cada rincón de la ciudad.
Mitos de la calle 52
Dentro de las múltiples teorías, una vertiente especula que la calle 52 no existe porque la suma de sus números da 7, el número de Cristo. Y son varios los mitos que hacen eco del carácter masón de los fundadores de la ciudad y la supuesta confrontación con la Iglesia. Tal es el caso del mito que hay detrás de la estatua del arquero divino que se encuentra en la plaza principal y está apuntando aparentemente hacia la catedral.
En ese sentido, la especulación indica que como hay 6 cuadras entre la catedral y la gobernación; 6 cuadras entre la gobernación y el bosque. Así como también 6 cuadras entre cada plaza y avenida, se debería a una redundancia del 6, que representa al anticristo. Otra teoría muy fuerte en la ciudad indica que la calle existía, pero bajo tierra. Esta teoría se apoya en el misterio de túneles secretos que existirían en la ciudad y unirían a los edificios principales.
Otros nombres que tuvo y la actualidad
A lo largo del tiempo se pueden recuperar distintos decretos que le dieron nombre a la calle 52 pero que quedaron como una anécdota. El Decreto de 1885 establece que “La Avenida 52 pasa a llamarse Puerto”. La calle conduciría hasta el Puerto de La Plata, pero su trazado llega solamente hasta la Avenida 122.
Posteriormente, en 1933, se sancionó la Ordenanza Nº 92 que estableció el nombre de “6 de septiembre” a la Avenida 52. Mientras que a través de la Ordenanza Nº 1099 en 1948 se modifica nuevamente colocándole el nombre del poeta José Hernández.
Lo cierto es que, en la actualidad, la mitológica Avenida 52, solo puede encontrarse en dos lugares de la ciudad. Más específicamente dentro del bosque platense, entre las Avenidas 1 y 122, y del otro lado entre 30 y 31
Data: Damián Piscitelli / Actualizado por Eduardo
Finocchi
